Este año se comenzará a implementar el control electrónico del SOA, aseguró el presidente del BSE

A pesar que desde el año 2009 existe el Seguro Obligatorio de Automotores (SOA), con lo que los todos vehículos automotores deben estar asegurados contra terceros para poder circular en el país, un porcentaje importante de ellos incumple la ley.

Según la ley 18.412, tanto el Ministerio del Interior como las intendencias departamentales son las encargadas de controlar que los automotores cuenten con el SOA.

Los vehículos que transiten sin estar asegurados podrán ser multados por un monto equivalente al costo del seguro y el Ministerio del Interior podrá confiscar los vehículos no asegurados.

Los únicos que están exceptos son las motos de menor cilindrada.

Sin embargo, el presidente del Banco de Seguros del Estado (BSE), José Amorín Batlle, reconoció en diálogo con Informativo Carve del Mediodía que más del 30% de las motos que circulan actualmente en el país carecen de seguro, mientras que, en el caso de los autos, esta cifra ronda el 8%.

Amorín Batlle destacó que las motos son las que presentan una situación más irregular, ya que muchas de ellas ni siquiera están empadronadas. De las empadronadas, aproximadamente el 50% cuenta al menos con SOA.

Para el presidente del BSE lo que hace falta son controles, lo cual debería ser más fácil actualmente con los medios electrónicos con los que se cuenta actualmente.

En cuanto a seguros de vehículos, el Estado cuenta con el 46% del mercado, mientras que el resto del mercado (54%) está en manos de 15 empresas, entre las que hay grandes competidores internacionales.

Se está trabajando en la implementación del control electrónico del SOA, que se espera sea implementado este período, según estimó Amorín Batlle. Va a tener una primera etapa que será de aviso, y luego se comenzarán a aplicar las multas correspondientes.

Por otra parte, destacó que “el gran siniestro” que tuvo el país del año pasado fue el que corresponde al sector agropecuario, por el cual el banco pagó cien millones de dólares, de los cuales 40 millones estaban cubiertos por pagos recabados por este concepto.

Esto representó el siniestro más grande de la historia del banco, aseguró el jerarca. “El banco pagó absolutamente todo y, además, nos preocupamos por conseguir reaseguros para esta zafra”, agregó.

Sin embargo, este hecho afectó el balance general de la institución, que culminó el año con 98 millones de dólares de utilidad.

Por otra parte, Amorín Batlle resaltó que durante el año 2023 el BSE facturó 1.500 millones de dólares, lo que representa un crecimiento enorme en comparación con los últimos veinte años. Este lo dio por un área nueva, que es el área previsional, que actualmente representa el 50% de la facturación total del banco, con reservas muy importantes, para cubrir 30 o 40 años de jubilaciones.

Consultado respecto a los seguros laborales, explicó que se redujo la tarifa en todas las industrias debido a una baja real en la siniestralidad. Particularmente en lo que tiene que ver con el sector de la pesca, esta disminución cayó del 11% al 9%. Sin embargo, Amorín Batlle sostuvo que la pesca debería pagar un 23% por la altísima sinietralidad que tiene.

La industria pesquera no está cumpliendo con lo que se es´ta pidiendo. “Estamos para colaborar, queremos ayudar a que esta industria exista. No podemos hacerlo bajando las tarifas, porque estas son técnicas”, dijo.

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