Arismendi (Mides) y la batalla contra el narco: ”Jóvenes que con nuestra ayuda ‘zafaron’ del narco, fueron asesinados en represalia”

 Arismendi (Mides) y la batalla contra el narco:  ”Jóvenes que con nuestra ayuda ‘zafaron’ del narco, fueron asesinados en represalia”

La ministra de Desarrollo, Marina Arismendi, relató en CIERRE 850 los desafíos y dificultades que se enfrentan para contrarrestar la influencia del narco en los jóvenes. “Estamos dando la batalla y es dura: tenemos el caso de jóvenes que -con nuestra ayuda- ‘zafaron’ del narco. Y fueron asesinados en represalia”, señaló.

Arismendi remarcó que el MIDES está presente en los lugares donde se han registrado problemas de inseguridad graves. “Estamos en San Luis (Canelones), acompañando 30 familias, con los jóvenes en red, que no estudian ni trabajan, para reinsertarlos”, señaló. “Le estamos disputando el territorio a los narcos. Es un problema que no tiene más de 15 años. En Malvín Norte el ministerio del Interior hizo un operativo. Pero el Mides no está para combatir el delito, sino que trabajamos con las familias que son víctimas o que están comprometidas con el narco, chico o grande”, dijo la ministra.

“¿Qué le ofrecemos a los jóvenes que sea mejor que la plata fácil? Es una batalla dura, hay que rescatar, cuerpo a cuerpo; y en esa tarea estamos, en las casas con los asistentes sociales. La cosa no es sencilla: el año pasado sufrimos la pérdida de dos jóvenes, en dos barrios distintos, en casos similares. Uno de Tres Ombúes, estaba trabajando muy bien en Jóvenes en Red, estaba ‘zafando’; y estando en la parada frente a la plaza, lo balearon y lo mataron. ¿Por qué? Porque era un traidor. Y hay varios casos así, es un proceder”.

Arismendi también habló de la situación del complejo Los Palomares. “Tiene problemas estructurales y sanitarios, con tuberculosis. Es un problema edilicio y sanitario. Fue una construcción de emergencia en su momento; igual que los lugares que se tiraron abajo en Malvín Norte”.

La jerarca señaló que se creó un gabinete de víctimas y testigos, familias que fueron obligadas a irse y testigos que se animan a explicar lo que pasó, y que deben ser protegidos para trabajar con la fiscalía. “Un testigo atendido y cuidado va a decir la verdad”, remarcó.

 

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